martes, 15 de mayo de 2012

¿La Poética?

Conoces a alguien, por un momento crees que es la persona que siempre estuviste esperando, pero de la noche a la mañana desaparece. Lo mismo sucede cuando dejas de conocer a alguien, desaparece esa persona, sólo que cierto día sin embargo, sí manifestó su deseo de conocerte.

Es relativamente fácil equivocarse, dejar pasar a grandes personas y retener a tu lado a otras insignificantes. Lo duro es saber elegir, posiblemente ahí esté el "kit" de la cuestión.

Resulta difícil sentirse identificado con alguien, sentir afinidad, no poder decir lo que sientes porque ya lo dice esa persona por ti.

Así es él, sabe sorprenderme, admiro la grandeza de sus palabras... considero que las siente. Y al fin y al cabo, sentir es lo que cuenta.

No sabe que consigue fascinarme, pero lo hace. Quizá sea esa inseguridad lo que le hace especial, diferente y contagioso.

Todos necesitan una musa, y aunque La Poética de Aristóteles echara por tierra la idea de que todo ser humano necesita en su vida una inspiración, yo ahora mismo lo tengo más claro que nunca, él me contagia con sus palabras dando vida a las mías.