jueves, 27 de septiembre de 2012

El baúl de los recuerdos

Abrir tu carpeta de imágenes, ver muchas carpetitas. Abrir aquella que pone ''antiguas''.Como el mismo nombre indica son de hace tiempo y, casualmente hace años que no las ves. ¡Cómo hemos crecido! ¡Cómo hemos cambiado! Tras ver las fotos sueltas, esas son las primeras reacciones. Pero, por otro lado hay otras que están ordenaditas de nuevo en carpetas. Observas cada una de ellas, ninguna es como la anterior ni como la siguiente, los títulos varían y tus sentimientos... también.

Sin ni siquiera haber pinchado en la carpeta ''x'' tu mente ya está en el lugar y en el momento en el que todas esas imágenes fueron tomadas, realmente lo estás viviendo de nuevo.
Abres la carpeta, ves la primera imagen, sientes como si el tiempo nunca hubiese avanzado, de hecho hubieras preferido que no lo hubiese hecho. Te ríes, ¡qué momento! eras feliz... lloras, ¡es un momento irrepetible! ¿Qué ha pasado con esa persona que está en la foto abrazándote? ¿Qué pasa con esa sonrisa? No has vuelto a verla reflejada en el espejo. ¿Quién eras y quién eres? Desde luego ni eras ni eres la misma persona...
Las fotografías van sucediéndose, estás en un momento ridículo de tu vida, te ríes, lloras... cierras la carpeta, la abres... respiras, suspiras... angustia.. es pena, es alegría. Desde luego, algo tienes claro, es único e inigualable.

Estás hecha un lío... no puedes cambiar el presente, tampoco el pasado y difícilmente el futuro. Te das cuenta de que cada decisión tomada cuenta, y te arrepientes de unas cuantas... No eres cobarde ''arrepentirse NO es de cobardes'' es un acto de humildad, ''somos humanos y nos equivocamos''.

Definitivamente, te planteas que a lo mejor no deberías haber abierto el baúl de los recuerdos pero, ¿qué es la vida sino el conjunto de recuerdos, buenos y malos, que cada uno tiene? retorcida paradoja, estúpida antítesis y arrolladora verosimilitud...